Bruselas multa a Microsoft con 497,2 millones por abuso de posición dominante

Empresas

La Comisión Europea obliga a la compañía informática a separar su
reproductor multimedia MediaPlayer del sistema operativo Windows.

La Comisión Europea (CE) impuso hoy una multa de 497,2 millones de euros

contra Microsoft por abuso de posición dominante en el mercado

informático y ordenó a la empresa desvincular el reproductor multimedia

MediaPlayer del sistema operativo Windows para ajustarse a la normativa

europea de competencia.

Asimismo, Bruselas da a Microsoft 90 días

de plazo para que ofrezca a los fabricantes una versión de Windows sin

Media Player. Además, el Ejecutivo comunitario instó al gigante de la

informática a que proporcione a sus competidores, en el plazo de 120

días, las interfaces necesarias para que sus productos sean compatibles

con el “omnipresente” Windows.

Se trata de la mayor

sanción en la historia de la UE contra una sola empresa por vulnerar la

legislación de competencia. No obstante, la compañía ya ha anunciado su

intención de recurrir el dictamen ante el Tribunal de Primera Instancia

de la UE, lo que puede retrasar varios años la solución efectiva del

caso.

“Las empresas dominantes tienen la responsabilidad

particular de garantizar que la forma de ejercer su actividad no

obstaculiza la competencia basada en los méritos y no perjudica a los

consumidores ni la innovación. Esta decisión restablece las condiciones

de competencia leal en los mercados afectados y fija unos principios

claros para el futuro comportamiento de una empresa con una posición

dominante tan sólida”, declara Monti, comisario europeo de Competencia.

Tras una amplia investigación de más de cinco años y tres pliegos de cargos,

Bruselas concluye que Microsoft ha abusado de su poder de mercado

restringiendo deliberadamente la interoperabilidad entre los PC Windows

y los servidores de grupos de trabajo de sus competidores y vinculando

su Windows Media Player (WMP), un producto en el que había competencia,

a su omnipresente sistema operativo Windows.

“Esta conducta

ilegal ha permitido a Microsoft conquistar una posición dominante en el

mercado de sistemas operativos para grupos de trabajo, que forman el

núcleo de las redes informáticas de las empresas”, considera la CE, para

quien “la conducta de Microsoft ha debilitado considerablemente la

competencia en el mercado de reproductores multimedia”.