Electro-estimulador pectoral femenino: bustos electrizantemente firmes

Se acabó el recurso a las hormonas y/o los implantes de silicona.

Basta enchufarse este singular sujetador para que los atributos alimenticios de las hembras de la especie humana se desarrollen en todo su esplendor. Unos impulsos eléctricos se encargan de accionar los músculos pectorales de una forma que costaría bastante reproducir copn ejercicios específicos, y sin tener que hacer más esfuerzo que el de embutirse en la prenda, la usuaria terminará al cabo de unas cuantas sesiones  más contenta con sus turgencias y con el personal masculino en derredor sensiblemente más contento también.

Disfruta tú también observando las posibilidades de este magnífico invento que te ofrecemos hoy en ITespresso… y sin tener que trasnochar para verlo en las teletiendas de madrugada.

Bueno, finalmente he conseguido terminar este artículo sin decir una sóla vez la palabra “tetas”. ¡Ups! ─Antonio Rentero [The Daily What]