“Hay muchas analogías entre la piratería de las impresoras 3D y la de la industria musical”

Hace un par de semanas pudimos comprobar en persona el funcionamiento de la primera impresora 3D que trabaja con multicolor y multimaterial en la feria Solidworks 2014, celebrada en San Diego. El producto, conocido como Objet500 Connex3, ha sido creado por el fabricante Stratasys. Con motivo de este lanzamiento hablamos con uno de sus responsables de Marketing, Jonathan L.Cobb sobre las nuevas tendencias en impresión 3D y los riesgos de estos equipos para la propiedad intelectual.

De momento estos dispositivos se usan para empresas, fábricas e industrias, pero las impresoras 3D están consiguiendo hacerse un hueco en el ámbito B2B pese a sus aún altos costes.  “Si miras al mercado hoy encontrarás impresoras 3D con precios que van desde cientos de miles de dólares hasta 6.000 dólares. Se crean decenas de modelos cada año, entre 40.000 y 60.000 máquinas. Es una cantidad muy significativa”, asegura el Vicepresidente Ejecutivo y de Marketing de Stratasys.

”No hace mucho el 40% se dirigían hacia las tiendas del mercado de consumo y este porcentaje está creciendo hasta el 60%. Principalmente la gente las utiliza para imprimir partes de forma gratuita. Hay 22.000 diseños de piezas online”, añade Cobb.

“Hay muchas analogías entre las impresoras 3D y la industria musical en lo que concierne a la piratería. Muchas empresas ofrecen sus productos online y tienes que pagar algunos dólares por descargar un archivo. Puedes imprimir en casa o a través de un servicio PeerToPeer y los fabricantes intentarán proteger sus derechos”, explica Cobb,

Aunque están irrumpiendo otros sectores como el de la moda, hasta la fecha las tres industrias que más estaban demandando tecnología de impresión 3D eran el sector de la automoción, la aeronáutica y la educación. El responsable nos cuenta por qué (en inglés) en este vídeo.