Intel zanja su batalla legal con Shenzhen Dongjin

Empresas

El fabricante demandó a la firma china por supuestas infracciones de los derechos de la propiedad intelectual en su tecnología para pantallas sensibles al tacto en móviles.

El gigante estadounidense de los microprocesadores Intel anunció el final de su batalla legal con la empresa china Shenzhen Dongjin Communications Technologies por presunta piratería, aunque no reveló los términos del acuerdo, según informa la agencia oficial Xinhua.

Un comunicado conjunto de ambas compañías subraya que sus estrategias de desarrollo y sus operaciones empresariales hacen que seguir con el pleito judicial no beneficie a los intereses comerciales de ninguna de ellas.

El acuerdo, al margen de los tribunales, respeta “la ley china y la protección de los derechos de la propiedad intelectual, así como los esfuerzos positivos hechos por la justicia china”. Ambas compañías se comprometen a respetar la confidencialidad de los detalles del pacto.

El caso se remonta a 2004, cuando Intel demandó a la compañía china por supuestas infracciones de los derechos de la propiedad intelectual en su tecnología para pantallas sensibles al tacto en teléfonos móviles, y le pidió una indemnización de 7,9 millones de dólares.

A petición de la multinacional estadounidense, en enero de 2005 un tribunal de la provincia de Cantón requisó y precintó todos los productos en disputa. Esto provocó que la empresa china contraatacase con una demanda a Intel por prácticas monopolísticas en un tribunal de Pekín.

Su acuerdo con la empresa china llega una semana antes de la segunda ronda del diálogo económico y estratégico entre China y EEUU, que se celebrará en Washington los días 23 y 24, y que buscará limar las interminables disputas comerciales entre ambos países.

El presidente de Intel, Paul Otellini, subrayó el pasado marzo la importancia estratégica que para la compañía tiene China. El último proyecto de la multinacional es una planta de 2.500 millones de dólares donde se fabricarán obleas integradas de 12 pulgadas (300 milímetros) para ordenadores personales, teléfonos móviles y otros productos de alta tecnología.

Intel entró en el mercado chino en 1985 y actualmente emplea a 6.000 personas en fábricas, centros de investigación y tiendas de 16 ciudades de este país.