La CMT insta a Telefónica a resolver las incidencias en la preselección

Empresas

Astel ha denunciado que las llamadas de clientes que deberían cursarse
por los operadores de preselección se pasan a cursar indebidamente por
Telefónica de España.

La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha instado a

Telefónica de España a resolver las incidencias que se producen en el

ámbito de la preselección y a abonar al operador preseleccionado las

cantidades facturadas indebidamente para que éste las devuelva

íntegramente al abonado.

En una resolución con fecha del 11 de

marzo, el regulador considera que “en caso de desactivación indebida de

preselección, Telefónica deberá resolver la incidencia en el plazo

máximo establecido en el correspondiente acuerdo de interconexión y

mantendrá informado al operador preseleccionado del estado de su

reclamación y de la fecha prevista de resolución”.

La decisión de

la CMT responde a un escrito presentado por la Asociación de Empresas

operadoras y de Servicios de Telecomunicaciones (Astel), que denunciaba

que “llamadas de clientes preseleccionados que deberían cursarse por los

operadores de preselección se pasan a cursar indebidamente por

Telefónica de España”, una incidencia que “sólo” se detecta cuando

posteriormente el operador dominante factura dichas llamadas.

Astel, que agrupa a las compañías competidoras de Telefónica, considera

que esta cuestión genera perjuicios tanto a los clientes como a los

operadores, al tiempo que desprestigia el servicio de preselección, por

lo que aboga por la implantación de “medios de prevención” y de

mecanismos ágiles que eviten estos perjuicios.

Telefónica de

España alegó por su parte que el nivel de calidad global del servicio de

preselección es “muy superior” al de otros servicios y se cifra en 0,15

reclamaciones por cada 100 líneas y trimestre, de las que únicamente

0,05 corresponden a averías reales. De enero a mayo de 2003, las

incidencias registradas se elevaron a 5.310, de las que sólo 1.874 son

imputables a Telefónica.

En un escrito posterior, el operador

dominante revela que el número de incidencias durante 2003 ascendió a 28

reclamaciones por cada 100.000 números preseleccionados, de las que

únicamente 8,4 eran responsabilidad de Telefónica. Además, las

reclamaciones “reiteradas” son insignificantes, ya que sólo constan 700

números de los que se ha presentado más de una reclamación.