La transición a la nube daña las cuentas de Adobe

Adobe había reducido sus previsiones para el trimestre actual, y aunque parezca extraño la culpa la tiene el cloud. Como otras muchas compañías, Adobe, responsable de Photoshop y Acrobat, entre otros programas de edición, optó por subirse al carro de la nube y ofrecer sus productos como un servicio, lo que se denomina ‘software-as-a-service’, o SaaS. Es decir, en lugar de vender una costosa licencia una vez, optan por cobrar cuotas mensuales por poder utilizar el software.

Las ventajas para el usuario son que no tiene que desembolsar una gran cantidad de dinero de una vez, que deja de pagar en cuanto deja de utilizar el software y que siempre está utilizando la última versión de los productos.

De cara al fabricante, se pasa de ingresos únicos a ingresos recurrentes, pero en esa transición, que es en la que está Adobe precisamente, se corre el riesgo de que los resultados se vean dañados.

En el tercer trimestre fiscal de la compañía, Adobe ha ganado 201,4 millones de dólares, o 40 centavos por acción, sobre ingresos de 1.080 millones de dólares, ligeramente por debajo de las previsiones de la compañía.

La adopción de Creative Cloud, la oferta cloud de Adobe, le ha ido bien a la empresa, que sólo en el tercer trimestre ha incorporado 200.000 suscripciones nuevas. Adobe añadió unas 8.000 suscripciones a Creative Cloud cada semana durante el trimestre, superando las 5.000 suscripciones semanales que la compañía alcanzó en su segundo trimestre fiscal.

Adobe lanzó Creative Suite 6, que incluye Photoshop, Illustrator, InDesing, Flash y Dreamweaver, y los productos Creative Cloud en el segundo trimestre.

Para su cuarto trimestre fiscal la compañía es conservadora y prevé ingresos de entre 1.070 y 1.120 millones de dólares y 125.000 suscripciones nuevas de Creative Cloud, o 94 millones de dólares de ingresos recurrentes.