La Nintendo Switch no convence a los inversores en su presentación
La compañía japonesa ha desvelado que la consola Switch costará 299 dólares, un precio por encima de lo esperado.
La bolsa de Tokyo no ha reaccionado positivamente al anuncio de los detalles del lanzamiento de la nueva consola de Nintendo. La Switch saldrá a la venta el 3 de marzo con un precio de 299,99 dólares, una cantidad más elevada de lo que esperaban los analistas.
El dispositivo, que se anunciaba en octubre del pasado año, viene en un formato híbrido que permite jugar en cualquier parte o conectarlo a los televisores. Vendrá acompañado de un nuevo juego de Zelda como su título de cabecera, y podrá conectarse a redes de juego online, un servicio que será gratuito los primeros meses.
La confirmación de los datos con los que ya se contaba y la revelación de precio, fecha, y otras pequeñas novedades no ha sido, sin embargo, suficiente para lograr una respuesta positiva en el mercado. Tras el evento de presentación, las acciones de la compañía en la bolsa de Tokyo caían, y al cierre habían perdido un 5,8%, hasta los 23.750 yenes. Entre los motivos para este turbulento arranque está el hecho de que el precio de la consola es mayor de lo que muchos preveían. Bloomberg cita a distintos expertos, que manejaban rangos de precios de entre 249 y 279 dólares.
Teniendo en cuenta los importes de sus competidoras directas, la PlayStation 4 y la Xbox One, que están a 260 y 240 dólares respectivamente en el mercado estadounidense, la Switch tiene un punto de partida complicado para lograr robarle ventas. Los analistas consideran que las dos primeras semanas tras el lanzamiento serán claves para su éxito.
En octubre del pasado año desde Nintendo anunciaban que esperaban vender 2 millones de Switch en su primer mes. Tras años renegando de los juegos para móviles, la empresa se veía obligada a entrar en este terreno en 2015, con una alianza con la desarrolladora DeNA. En verano de 2016, Pokemon GO devolvía a la compañía nipona a la primera línea de titulares con un éxito arrollador, que se ha ido moderando desde entonces. Con la Switch se comprobará si Nintendo vuelve a posicionarse como un agente indispensable en el mercado de las consolas o debe replantearse su orientación de negocio.