OMExpo 2010: Madrid, capital del marketing online

Cloud

Durante dos días el recinto ferial Juan Carlos I ha acogido a las principales compañías del sector y a importantes gurús de Internet que han hablado de e-Commerce, rentabilidad online, SEO…

Hace seis años, OMExpo -anteriormente conocido como OME- comenzó siendo poco más que una “reunión de unos cuantos profesionales del marketing online” que hablaban de tendencias y posibles salidas de un negocio incipiente.

Sin embargo, en muy poco periodo de tiempo se ha convertido en el punto de encuentro indiscutible de un sector en auge, y su proyección ha traspasado las fronteras.

No hay nada más que echar la vista atrás unos años para ver el crecimiento de la feria. De celebrarse hace dos ediciones en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid ya en la edición pasada dio el salto a ocupar un pabellón entero del recinto ferial Juan Carlos I de la capital, el número 2, con 5.000 metros cuadrados de superficie expositiva.

El éxito de la edición 2009 fue tal que a Online Marketing España se le cambió el nombre por OMExpo, para apostar por su internacionalización. Este año la feria ha vuelto a ocupar el segundo pabellón de Ifema, y a falta de confirmación oficial, se estima que se han superado con creces los 5.454 visitantes que estuvieron en el evento el año pasado.

De hecho desde la organización se aseguraba que la previsión para esta edición era de 6.000 visitantes profesionales. Posiblemente hayan sido más. En cuanto a expositores, han sido casi un centenar de empresas las que han expuesto en el evento -87 según el programa oficial-

Los puntos fuertes de OMExpo han sido, como veremos en las siguientes partes del reportaje, su elevada profesionalización y asistencia, así como su proyección internacional. Asímismo, un completo programa de conferencias repartidas en 4 salas, en las que más de 100 conferenciantes y primeros espadas del sector compartieron sus experiencias con los visitantes.

Sin embargo, también ha habido algún que otro ‘tirón de orejas’ a la organización. Los asistentes se quejaban del contenido de algunas de ellas y de lo pequeños que quedaron algunos aforos cuando participaban ponentes del más alto nivel.

Además de poder ver a las empresas que manejan el “pastel” del marketing online en directo en cada uno de los expositores de la feria, el principal atractivo de cada OMExpo es su plantel de conferencias.

La agenda de la edición de este año fue poco menos que inabarcable. En la feria había cuatro salas de conferencias, en las que se celebró una ponencia con un intervalo de menos de una hora entre cada una de ellas.

De hecho, la sala número 4 fue llamada por los asistentes “la sala del microblogging“, en clara alusión a la brevedad de los mensajes en Twitter. Y es que allí las conferencias duraban 20 minutos como máximo, y acto seguido se pasaba a abordar otro tema.

Tal fue el éxito del programa de conferencias que los asistentes al evento manifestaron dos tipos de quejas principales: por un lado, la imposibilidad de acudir a dos ponencias que se estuvieran celebrando de manera simultánea y por otro, el aforo, a menudo limitado dado el interés de las sesiones, que obligaba a escuchar a veces a los ponentes de pie en la sala o incluso desde fuera de ella. Abarrotado.

Y es que todo el mundo quería tener la oportunidad de escuchar a primeros espadas del sector como Blake Chandlee, vicepresidente de ventas para EMEA de Facebook, a Laura Chiabi, head of research and insights de Yahoo! Europe, al presidente de la Mobile Marketing Association en España… entre otros.

Las redes sociales, los nuevos medios en Internet, el marketing como contenido, la creatividad, la importancia del SEO, el boom de la publicidad segmentada, el gaming… fueron sólo algunos de los temas que se abordaron.

En la mayoría de las ocasiones -también hay que reconocerlo- no se ofrecieron grandes claves ni se desvelaron importantes misterios… la importancia radicaba más en tener la oportunidad de ver en directo a gurús del sector que lo que realmente vinieron a decir.

Incluso hubo algunas críticas al respecto: “Algunas de las charlas y mesas redondas, en las que participan directivos de algunas empresas, no son más que publicidad de sus propias empresas. Para eso no hemos venido”, aseguraba M. Ali, uno de los visitantes.

Otro de los aspectos que hizo quejarse a más de un asistente -en relación a las conferencias- fue el hecho de que las ponencias no se emitieran en streaming como en otros eventos, para poder seguirlas por Internet ante la imposibilidad de acceder a veces a los auditorios.

Tampoco había conexión wi-fi en la feria, por lo que los que quisieron actualizar sus blogs o twittear desde el evento se vieron muy limitados a la utilización de los diez ordenadores que se encontraban a su disposición en el área bloggers. Nada de twitteos desde la sala de conferencias, por ejemplo, con la visibilidad que eso hubiera aportado al salón.

Respecto a la conexión de Internet también se produjeron quejas entre los expositores. La imposibilidad de tener wi-fi en los stands suponía tener que pagar la conexión de Ifema. “Ya nos hacen pagar suficiente como para además no tener conexión a Internet”, señalaba Angel V. desde su expositor.

Son algunos de los puntos que la organización tiene que subsanar en próximas ediciones, para dar respuesta a las necesidades que crea -y a las expectativas que genera- un evento que ha crecido de manera impresionante en los últimos años.

No hubo quejas entre las empresas participantes por el número de visitantes del evento, ni por los stands abarrotados de posibles clientes desde la apertura de puertas del evento hasta el cierre, los dos días que se celebró. Es una feria en la que se genera negocio, de eso no hay duda.

Y es que otro de sus puntos fuertes es la internacionalización del evento. No sólo por la asistencia de ponentes y visitantes extranjeros -cada vez más numerosos- sino porque desde el año pasado OMExpo Madrid es sólo un evento más de una lista de ciudades que también se convierten, una vez al año, en capital del marketing online.

Sao Paulo, Lisboa y México D.F. son plazas en las que también se celebra OMExpo. Por eso el año pasado se le cambió el nombre al evento -tradicionalmente conocido como OME (Online Marketing España)- para que traspasara fronteras.

Es sólo un ejemplo del crecimiento de la feria, a la que todavía le queda mucho más por crecer. Como dijeron sus organizadores en el evento: “esto no acaba más que de comenzar”.

Lea también :