Sidecar dice adiós
Pivotar del ridesharing a las entregas no le ha garantizado la supervivencia a esta competidora de Uber.
En el sector del consumo colaborativo no todo son alegrías y rondas de financiación desorbitadas. También hay startups que tienen que cerrar las puertas a causa de problemas legales o simplemente porque no consiguen el capital necesario para asegurar su supervivencia.
Sidecar, una empresa estadounidense pionera en ridesharing, que compite con Uber y Lyft, ha anunciado que cesará todos sus servicios a partir de mañana, 31 de diciembre. Sus fundadores, Sunil Paul y Jahan Khanna, así lo han comunicado mediante un post en Medium.
El cierre de Sidecar no ha sido exactamente una sorpresa. Durante este 2015 la empresa había decidido pasar del transporte de personas al transporte de mercancías y las entregas, con el fin de diferenciarse en el mercado.
“Hoy es un punto de inflexión para Sidecar mientras nos preparamos para poner fin a nuestro servicio de conducción y entrega para que podamos trabajar en alternativas estratégicas y sentar las bases para la próxima gran cosa”, señalan los creadores de la startup. En su despedida la pareja de cofundadores se definen como “líderes en innovación a pesar de la ventaja significativa en capital” y aseguran haber “desplegado nuevos productos que marcan la tendencia que otros seguirán”.
Los emprendedores se atribuyen haber conseguido conectar a los pasajeros con los conductores y crear un modelo donde podían fijar sus propios precios, así como haber sido los primeros en introducir algunas innovaciones como los ETA compartidos, los trayectos compartidos y otras. Asimismo, aseguran “haber cambiado la ley de transporte y creado un nuevo medio de transporte que ha transformado las cuidades y hecho la vida más fácil y mejor para millones de personas”.
Sidecar, fundada en 2011, no ha podido plantar cara a Uber y Lyft ni seducir a los inversores como lo han hecho sus rivales. Mientras la primera ha obtenido más de 10.000 millones de dólares de fondos y la segunda se ha embolsado más de 1.000 millones de financiación, Sidecar apenas ha levantado 35 millones de dólares durante sus cuatro años de vida útil.