Toshiba AC100

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Este primer netbook con Android es un equipo ligero y funcional, apropiado para tareas sencillas.

El verano pasado Toshiba introducía el AC100, un netbook en apariencia, pero con algunas propiedades y herramientas más propias de un teléfono inteligente. Así, el equipo cuenta con la versión 2.1 de la plataforma Android incorporada, suponiendo el primer dispositivo de su segmento corriendo con la misma.

Con un tamaño de 10’1 pulgadas, este ‘smart-netbook’ resulta muy cómodo de transportar y muy ligero (0,87 kg).  No obstante, quizá Toshiba haya pecado demasiado en intentar que su apariencia se asemeje a la de un teléfono o un tablet. El resultado es que la carcasa que protege el ordenador, resulte bastante endeble. De hecho, si se hace un poco de presión puede doblarse fácilmente y no costaría demasiado partirla.

El funcionamiento de la plataforma de Android como sistema operativo para miniportátiles no nos convence demasiado por el momento. La gracia de ejecutar aplicaciones se pierde un poco cuando se elimina la posibilidad de usar una pantalla táctil como interfaz.

Además, la instalación de programas con prestaciones más avanzadas queda también coartada. En este sentido, como herramientas ‘sucedáneas’ para las funciones principales que se usan en este tipo de productos, el netbook cuenta con Opera como navegador predefinido, Documents to Go para procesos ofimáticos y POP3, IMAP y soporte de Exchange como recrusos para gestionar e-mails. A estos se sumarían algunos productos de software del fabricante como Toshiba Media Player o Toshiba Social Network Widget.

Quizá, la cosa mejore cuando Honeycomb, la versión 3.0 del SO, llegue al mercado en unos meses. Aunque se trata de un sistema preparado sobre todo para tablets, también hay que considerar que sería la primera vez que Google ha diseñado una plataforma pensando cómo optimizarla en pantallas más grandes. Así, probablemente los netbooks y otros dispositivos se beneficien en buena medida de sus nuevas implementaciones.

En lo que sí responde muy bien el AC100 es a la hora de reproducir vídeo de alta definición. Su pantalla retroiluminada de alto brillo y resolución de 1.024 x 600 píxeles hace un buen trabajo en la parte visible. Oculto en el interior del equipo, el potente chip gráfico Nvidia Tegra 250 desempeña un papel fundamental. Estas características se completan con una salida HDMI para exportar vídeo de 1024 píxeles a cualquier dispositivo que soporte esta conexión.

El hecho de contar con Android limita al dispositivo en algunas funciones, pero también le aporta otras ventajas. Además de su sencillez y su funcionalidad destaca la posibilidad de personalizar el portátil con hasta cinco apariencias diferentes, una para cada entorno (trabajo, personal, uso público, etc).  Su forma de encenderse y apagarse es quizar su mayor punto a favor. El AC100 puede encenderse y apagarse muy fácilmente y ponerse en marcha con tan sólo 1 segundo de demora, como si se tratara de un auténtico smartphone. Estando acostumbrados a otros tediosos sistemas operativos, esto es muy de agradecer.

La autonomía también es otro punto a favor. Según afirma el fabricante, es capaz de aguantar hasta 8 horas de duración a pleno rendimiento (con navegación y reproducción de vídeo incluidas) y permanecer una semana completa en modo stand-by sin necesidad de recargarse. En la práctica, hay que decir que su autonomía a toda marcha es una hora o incluso un par menos.

Las especificaciones de este netbook se completan con un procesador ARM Cortex-A9 MPCore, una webcam de 1,3 megapíxeles, WiFi, Bluetooth 2.1, 3G opcional, 32 GB SSD, 512 MB de memoria RAM DDR2, una ranura lectora de SD y SDHC, un puerto USB 2.0 y otro mini USB.

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