4 errores que cometen las empresas españolas a la hora de digitalizarse y cómo abordarlos
No es solo cuestión de reforzar los equipos con nuevos perfiles TIC, sino formar y acompañar a los que ya tenemos para llevar a nuestra plantilla a su máximo potencial.
La digitalización que han experimentado las empresas en estos últimos años ha sido un proceso vertiginoso. La pandemia, además, ha obligado a adaptarse a esta nueva situación casi de un día para otro y aunque, por momentos, haya sido un proceso complicado, la mayoría de las empresas han salido reforzadas de esta crisis.
Según el Índice de la Economía y Sociedades Digitales (DESI) que elabora la Comisión Europea anualmente, España lleva años por encima de la media europea en materia de digitalización y en el último informe de 2020, España se situaba en el puesto número 11, por delante de otras grandes potencias europeas como Alemania, Francia o Italia.
Sin embargo, estos procesos nunca son fáciles y el equipo de Entelgy, The BusinessTech Consultancy han identificado una serie de errores recurrentes en la transformación digital de las empresas, que estas deben tener en cuenta para conseguir una digitalización 100% efectiva:
- Idear un proceso poco ambicioso: La transformación digital no debe tratar simplemente de convertir en digital todo aquello que ya existía en el negocio, que es uno de los errores más habituales, sino ir más allá y transformar también el modelo de negocio al completo.
Las empresas deben evitar instaurar soluciones generalistas y hacer un análisis profundo sobre cómo transformar el negocio para aprovechar las oportunidades que la digitalización nos brinda y utilizar la tecnología como herramienta para conseguir beneficios a largo plazo.
- Apoyarse sólo en perfiles TIC: La digitalización parte de la tecnología, pero tiene que abarcar todo: cultura, procesos y, sobre todo talento, que va a ser el motor del cambio. Por ello, hay que tener en cuenta el grado de madurez digital de los trabajadores y formarles si es necesario para que ellos también sean capaces de seguir el ritmo de la digitalización.
- No reforzar la ciberseguridad: Cuando una organización transforma sus procesos para hacerlos más digitales, por ejemplo al implantar una dinámica alojada en la nube, debe tener en cuenta también la ciberseguridad. Es necesario proteger el entorno digital que estamos creando, ya que los ciberdelincuentes aprovechan cualquier resquicio o brecha para atacar.
- Desaprovechar las posibilidades del análisis de datos: Al digitalizar tantos procesos, las empresas obtienen una enorme cantidad de información muy valiosa para el desarrollo del negocio. Sin embargo, estas no suelen aprovechar para analizarlos, algo que puede resultar muy beneficioso porque ofrece información sobre los clientes, el correcto funcionamiento del negocio en tiempo real y cómo actuar en cada momento para ser mucho más eficientes, y por tanto, más competitivos.
“Las empresas españolas tienen la oportunidad de liderar en el ámbito de digitalización, de convertirse en un referente europeo, pero sin caer en los errores de una aplicación rápida y sin estrategia, sino de manera consciente para que la transformación sea duradera en el tiempo”, añade Miguel Ángel Barrio, Director de Entelgy Digital.