Bruselas no pondrá trabas a la VoIP

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La telefonía a través de Internet (VoIP) cuenta ya con un millón de usuarios en EEUU y casi cinco en Japón.

La Comisión Europea anunció el viernes que no pondrá trabas al desarrollo de la telefonía por Internet, denominada voz sobre IP (VoIP) en Europa, pese al temor que han manifestado los operadores tradicionales de telefonía por la intensa competencia en precios que supone esta nueva tecnología.

La VoIP permite al usuario hablar a través de un ordenador que esté conectado a Internet con otra persona que también está conectada o incluso con un número de teléfono tradicional o móvil. Este mecanismo logra convertir la voz sonora en un documento digital que viaja a través de Internet y lo reconvierte en voz en el ordenador de destino.

La ventaja del sistema, que funciona de forma óptima con banda ancha, permite la comunicación sin retrasos en los intercambios de voz y de forma ilimitada mientras uno esté conectado. Por ello, varios analistas ya han advertido de que el VoIP podría sustituir el correo electrónico o los mensajes instantáneos en un futuro.

El Ejecutivo comunitario reconoce en un informe que el VoIP tiene el poder de “cambiar radicalmente” la existente estructura de los mercados electrónicos de comunicación. “La tecnología IP es un tema de una importancia enorme para la convergencia esperada de voz y datos de red”, apunta.

La presencia de esta tecnología en Europa es, por el momento, muy limitada en estos momentos, aunque de un potencial de crecimiento paralelo al de la banda ancha y líneas de alta velocidad. Francia lidera este apartado en cuanto a penetración ya que en la actualidad dispone de 220.000 usuarios, seguido de Alemania (110.000) y Reino Unido (50.000).

Estas cifras están todavía lejos de los datos de Estados Unidos, que tiene un millón de usuarios, y de Japón, que encabeza esta lista con casi cinco millones (4,9 millones en total).

Por todo ello, tras una reunión con responsables de Competencia de los Veinticinco en Bruselas, la comisaria de Sociedad de la Información y los Medios, Viviane Reding, apostó hoy por una regulación de mínimos de este novedoso sector, con el fin de no provocar una “sobreregulación” que limite su crecimiento.

La Comisión quiere potenciar la entrada de nuevos operadores y, a la vez, regular la concesión de números para las telefonías por Internet de forma “transparente y no discriminatoria”. “Es necesario que los prestatarios tengan teléfonos sobre todos los operadores”, subrayó el portavoz de Sociedad de Información y los Medios, Martin Selmayr.

Bruselas quiere además abrir a este mercado a las actuales compañías tradicionales de telefonía, y que las ventajas de la telefonía gratuita por Internet impulse definitivamente el uso de la banda ancha entre los ciudadanos europeos. El porcentaje de implantación de la banda ancha en los Veinticinco se encuentra todavía en un escaso 6,5 por ciento, cifra que se aumenta hasta el 7,5 por ciento si se toma en cuenta la realidad en los Quince. El objetivo de la Comisión es que este dato se incremente hasta el 50 por ciento en los próximos años.

Reding subrayó el “enorme” potencial del mismo y apoyó una “ligera regulación” en torno al VoIP, siempre bajo la premisa de que se evite una “excesiva reglamentación” de esta nueva tecnología. “Quiero sostener firmemente un enfoque abierto y a favor de la competencia en torno a la voz por Internet en los 25 Estados miembros. Por ello, me felicito de la primera señal positiva que los reguladores nacionales han dado hoy conjuntamente”, declaró en un comunicado.

La comisaria se mostró “persuadida” de que el VoIP permitirá la aparición de servicios “más diversificados e innovadores”, que podrán tener efectos “más importantes” sobre los consumidores y las empresas que el correo electrónico en la actualidad.

Un apartado de gran valor para Bruselas es que este sistema permitirá sustituir a la telefonía tradicional, bien fija o móvil, en caso de catástrofes como las del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, donde las líneas telefónicas quedaron colapsadas durante horas y días.

“El desastre del 11 de septiembre revela que el Protocolo por Internet basado en este sistema, continúa trabajando donde los sistemas de telefonía fallan”, constata la CE en su informe, donde se plantea como desafíos del VoIP el que se establezcan “mejores medios y una mayor seguridad” en el uso de Internet.

A la pregunta de si este servicio VoIP amenaza las inversiones en infraestructuras que han hecho los operadores tradicionales en los últimos tiempos, el Ejecutivo comunitario subraya que el marco regulador europeo sobre comunicaciones electrónicas es “neutro” y no busca elegir “entre ganadores o perdedores, o a favor de una tecnología en particular”.

Así, deja claro que corresponde a las empresas posicionarse en el mercado y a los consumidores, decidir. Sin embargo, reconoce que “el mundo se dirige hacia la IP tecnología” y que este protocolo de Internet provee un “portador común de datos” bajo un formato digital, inclusive la voz, para cualquier información almacenada.