Fundada en noviembre de 2001 con 40 millones de dólares y código de software por IBM, a fecha de hoy la Fundación Eclipse cuenta nada más y nada menos que con 91 miembros, a los que en los últimos meses y semanas se han incroporado compañías de la talla de BEA Systems, Computer Associates o Sybase.
IBM ha sabido, a lo largo de los años y a pesar de algunas advertencias de Sun Microsystems, el gran ausente de este proyecto, convertir la Fundación Eclipse en una referencia para desarrollar software y herramientas Java, basando el trabajo y aportaciones de los miembros en colaboraciones de fuente abierta.
Las contribuciones de todos los miembros están impulsando una plataforma que ha tardado en despegar pero que ahora marcha viento en popa. El futuro de Eclipse ha estado ensombrecido por los temores de un férreo control por parte de IBM, que ha sabido mantener la independencia de un poyecto que escindió de su propia compañía para aplacar a los asustadizos.
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