ASIMO con sus 130cm de altura y sus 48kg de peso sigue siendo un robot que como suele decirse no tiene ni media hostia, además de que tampoco es que pueda seguirnos muy rápido con su velocidad máxima de 9km/h, así que por ahora no creo que la humanidad esté en peligro.
Pero lo que sí supone ASIMO es un paso muy importante para empezar a integrar los robots de aspecto humanoide en nuestra sociedad. Para ello cuenta con una renovada y muy sofisticada inteligencia artificial y sensores que le permiten conocer su entorno, predecir movimientos, reconocer personas y tomar decisiones acordes a lo que sucede a su alrededor.
Pero además de eso, el nuevo ASIMO también cuenta con unas manos con un grado de movilidad increíble y que junto con los sensores táctiles y de fuerza situados en sus palmas y dedos le permiten no sólo realizar tareas cotidianas con soltura y delicadeza sino incluso complejas como por ejemplo hablar con lenguaje de signos.
Lo único que creo que le haría falta es una luz en su cabeza, verde para saber que sigue siendo amistoso y roja para saber que quiere emular a Terminator. Y es que si algo nos ha enseñado la tele y el cine es que cualquier robot con alguna luz roja es sencillamente malvado y debemos destruirlo por supuesto de alguna manera rocambolesca. [Honda]
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