Emprendimiento social: tú emprendes, todos ganamos

Iniciativas de apoyo al emprendimiento social

Actualmente existen varias entidades y programas que ofrecen apoyo y soporte, más allá de la financiación, a los emprendedores sociales. Es el caso, por ejemplo, de UnLtd Spain, que desarrolla un programa en la región centro de España. El Gamechangers 2014 da acceso a un abanico de recursos que abarca formación, asesoría cualificada individualizada, capital semilla de hasta 5.000 euros y el acceso a una amplia red de ejecutivos y filántropos interesados en apoyar el emprendimiento social. El programa también dispone de una serie de alianzas estratégicas con empresas de consultoría, fundaciones, instituciones académicas, corporaciones y Administraciones Públicas.

Dentro del ámbito de los bancos de tiempo, el área de Bancos de Tiempo y Cohesión Social de la Asociación Salud y Familia desarrolla el Banco de Tiempo Comunitario, un proyecto de intercambio de tiempo (hora por hora) que surgió a través de un proyecto Equal de fomento a iniciativas para la igualdad de oportunidades.

Según explica Josefina Altés, coordinadora de Bancos de Tiempo de esta entidad catalana, cada banco de tiempo se adapta a las necesidades y objetivos que se espera conseguir en cada caso: inclusión social, dinamización intergeneracional, igualdad de género, cohesión social, etc. La asociación trabaja ahora mismo en la creación y consolidación de una red nacional que permita los intercambios entre bancos de tiempo.

En Madrid, Espíritu23 ofrece un espacio de coworking para emprendedores sociales en el céntrico barrio de Malasaña. Emprendedores de diversos ámbitos, desde gestores culturales hasta empresas que venden vino, pasando por periodistas, fotógrafos, ONG, profesionales de publicidad y marketing, programación, diseño, etc., acuden a desarrollar su labor y a compartir tiempo, espacio y proyectos. A todos ellos les ofrece servicios de oficina y de espíritu colaborativo, pero también comunicación online y convencional, wi-fi, impresora, teléfono, contactos y generación de sinergias.

Para Pedro Bravo, integrante de Espíritu23, esta iniciativa “surge de la necesidad de hacer las cosas no buscando sólo la rentabilidad económica sino también, y sobre todo, la rentabilidad social”. Con ella, pretenden “contribuir a la dinamización social, económica y cultural del barrio de Malasaña y la ciudad de Madrid”, poniendo en contacto el talento y la experiencia de todos los emprendedores que pasan por allí.

Además, Espíritu23 convoca Proyectos con Espíritu, un programa para emprendedores sociales que trata de impulsar iniciativas de este tipo y cuya primera edición se celebró el año pasado. Los dos mejores proyectos recibieron 2.000 euros de ayuda cada uno para ponerse en marcha, además de asesoramiento en la estrategia de marca y de comunicación y una mesa de trabajo en el espacio de coworking.