La lucha sobre los estándares de se mitiga

Movilidad

Los dos grandes grupos que están detrás de la nueva tecnología
inalámbrica acercan sus posiciones.

La ha reconocido la versión de la tecnología ultrawideband de la y ha anunciado que respaldará tanto

al grupo como su especificación de radio propuesta, según ha anunciado

Intel, que es miembro de ambos grupos.

La tecnología ultrawideband permite que los PCs y otros dispositivos electrónicos

se comuniquen entre sí de forma inalámbrica a una velocidad de 480 Mbps

en un radio de 10 metros.

Craig Mathias, analista de la firma de

investigación Farpoint Group, afirma que este paso muestra que los

esfuerzos para crear un estándar industrial están avanzandos, ayudando a

eliminar los temores de que la ultrawideband no llegue a despegar

mientras otras tecnologías inalámbricas la reemplacen al no haber un

estándar que facilite su implantación.

“Esto es un estímulo para

el mercado porque, a pesar de la cantidad de estándares, las

asociaciones están avanzando y eso hace que el lanzamiento de los

dispositivos llegue antes de lo previsto”, afirma Mathias. “La cuestión

es: ¿cómo es de grande el mercado y cuándo llegarán a él los

dispositivos?”.

Se espera que los chips con ultrawideband

lleguen al mercado a mediados de 2005, por lo que los dispositivos que

utilicen estos procesadores podrían estar disponibles para las Navidades

de eses año.

Hay quien opina que ultrawideband será el sustituto

de la tecnología inalámbrica Bluetooth, ya que permite que sean

transferidos más cantidad de datos, pero su crecimiento se ha visto en

peligro por un lucha de propuestas. Los miembros del Institute of

Electrical and Electronic Engineers, el famosos , prefieren la propuesta del MBOA, pero el estándar

rival de Motorola y otros están ganando los suficientes votos como para

impedir la aprobación de la tecnología MBOA. Este enfrentamiento entre

las dos facciones está ralentizando la creación y conclusión de un

estándar. Y es que para que un estándar se termine debe ser aprobado por

el 75 por ciento de las compañías que trabajan en él.