El principal secreto de los juegos iPawn son sus piezas hechas de plástico ABS conductivo que permiten reconocer cuando un jugador interactúa con las mismas y la pantalla. Al sujetar la pieza y luego colocarla en otra parte del tablero, el iPad y software del juego es capaz de saber la posición y actuar en consecuencia.
Así ya es imposible hacer trampas y el juego va asistiéndonos mientras jugamos, lleva la puntuación, nos muestra imágenes y animaciones, así como sonidos.
Gracias a esto tenemos lo mejor de los dos mundos, por un lado algo tangible que podemos sentir como son las piezas, y por otro las capacidades de una tablet para hacerlo todo un poquito más espectacular.
Por ahora se venden 4 juegos diferentes para 4 jugadores al precio de 10 libras cada uno, pero probablemente si tienen éxito veremos muchos más juegos que mezclen el mundo real y el virtual.
Eso sí, no me veo un juego tan grande como Hotel en una pantallica de 10″ o atravesándola para quitarle el hueso de la risa al paciente de Operación. [iPawn]
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