Quizá no llame demasiado la atención cuando se encuentra en modo plegado, ocupando un metro escaso de altura.
Pero cuando empiezas a desplegarlo y el trípode empieza a crecer algo te hace intuir que los cerca de 5.000€ que cuesta y el hecho de que su nombre haga un juego de palabras con el termino ingles para denominar un árbol igual están justificados.
Y a ese árbol podrá trepar con bastante comodidad y sin temer porque sus ramas se vengan abajo el fotógrafo que desée matar dos pájaros de un tiro y ahorrarse lo que algunos compañeros de la profesión se ven obligados a acarrear para su trabajo, es decir, una escalera de aluminio para superar la barrera de colegas que se interponen entre el objetivo de su cámara y el sujeto a inmortalizar.
También será el complemento perfecto para soslayar las muchedumbres de conciertos, desfiles o discursos, sobrevolándolos mientras con el mismo instrumento que te elevas sobre las cabezas circundantes afianzas la cámara fotográfica o videográfica, puesto que su resistencia le permite soportar en su parte superior equipo de hasta 75 kilos de peso. -[DSLRnews]
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