El caso es que el marido de la mujer, Faustino Utrera, secuestró a sus hace 15 años, asegurándole que no los volvería a ver. En esa época, la hija tenía 3 años y el hijo 2.
Tras largos años buscando a sus hijos, la mujer hizo una búsqueda por Facebook y encontró el perfil de su hija, a la que agregó, aunque supongo que el mensaje de invitación no fue algo así como “hola, soy tu verdadera madre a la que que perdiste hace 15 años, quieres ser mi amiga?”.
Tras varios mensajes, cientos de etiquetas, decenas de “me gusta” y varias galletas de la fortuna, pudo convencerla de que era su madre, a ella y a la policía, que se encargó de hacer una investigación adicional, y finalmente arrestando a su padre.
Un par de consejos a los criminales, secuestradores y terroristas: el primero es que os dediquéis a otra cosa más provechosa para vosotros y la humanidad, y el segundo que tengáis cuidado con las redes sociales, ya sea usándolas vosotros mismos como vuestras víctimas, ya sabemos que entre delito y delito apetece relajarse con una granja virtual pero hay cosas que no son compatibles.— :Dani Burón [Wesh]
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