Vodafone se replantea el control de sus filiales

Movilidad

La operadora británica podría renunciar a la adquisición de su filial holandesa Vodafone Libertel, después de no llegar a un acuerdo en las negociaciones sobre el precio del 22 por ciento que controla esta filial.

La oferta de 11 euros por acción no convenció a los directivos de la compañía holandesa porque, según su portavoz, Andre van der Elsen, no refleja el valor de la empresa. Asimismo, los analistas estiman que el precio adecuado para la operación debería rondar los 13 ó 14 euros por acción.

Según fuentes cercanas, esta negativa podría truncar el deseo del mayor grupo de telefonía móvil de comprar las participaciones que le faltan en sus filiales de Holanda, Suecia y Portugal, una operación que podría suponerle un coste de hasta 2.000 millones de euros.

Bajo este contexto, el objetivo de Vodafone es reforzar su posición en el mercado europeo, donde actualmente controla el 77,6 por ciento de Libertel, el 74,7 por ciento de la división sueca Europolitan y el 61,4 por ciento de la portuguesa Telecel. Así, si prospera el plan de toma de control, aseguran las mismas fuentes, el principal cometido del grupo británico es sacar a sus filiales de bolsa en sus respectivos mercados locales. De hecho, el grupo británico pretende aumentar el número de clientes con la venta de servicios como mensajes fotográficos. En su primer trimestre fiscal, su cartera de abonados creció un 4,7 por ciento.