Alimentada por 4 pilas, con la cámara FishEyes podremos contemplar en una pantalla LCD a todo color cómo nuestro anzuelo aguarda pacientemente a que se acerque la cena, y ya no tendremos excusa cuando después de un largo tira y afloja y segundos de emoción contenida sacamos un ruinoso zapato podrido del agua. ¿Quién no lo ha vivido?
Al final del cable (que sirve para transmitir el vídeo y alimenta también la cámara) encontramos también una luz LED que podremos activar y desactivar remotamente (si eso atrae a los peces ¿No es hacer trampa?), por lo que aún en aguas bastante movidas y turbias podremos ver lo que sucede alrededor de nuestra cebo. Y todo esto al “módico” precio de $79,99.
A mi entender a esta caña de pesca sólo le falta un botón para poder hacer fotos, y así aunque después de una larga jornada de pesca nos vayamos de vacío a casa, podríamos presumir de lo cerca que hemos estado de atrapar una buena pieza. ─ [Fisheyes]
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