Por un lado tenemos el Galaxy Tab 10.1 con su pantalla de 10 pulgadas y con un parecido más que razonable con el iPad. Funcionará con Honeycomb, como era de esperar, por lo que muy probablemente cuente con un procesador de doble núcleo.
Lo que si sabemos es que pesa 600 gramos y tiene un grosor de 11 milímetros, cámara frontal y trasera. Todo esto por un precio que da un poco de vértigo ya que se rumorea que sobrepasará los 1000 euros.
En cuanto al Galaxy S II, tendrá una pantalla de 4,27 pulgadas Super AMOLED Plus y un procesador de doble núcleo de 1GHz. Android Gingerbread, cámara trasera de 8MP y frontal de 2MP completan las características de este móvil fino filipino de 8,5mm y 116g de peso. El precio casi que no me atrevo a preguntarlo, pero en breve lo veremos en el mercado detrás de un escaparate que llenaremos de vaho y babas.— Dani Burón [ITespresso]
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