La CMT insta a que las operadoras financien el servicio universal

Movilidad

El regulador va a identificar los mercados de referencia establecidos
por la nueva legislación de telecomunicaciones, dando prioridad a los
que necesitan un cambio.

El presidente de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones

(CMT), Carlos Bustelo, se ha mostrado partidario de que el próximo año

se ponga en marcha el Fondo de Financiación del Servicio Universal. Este

fondo será sufragado por todas las operadoras, mientras que hasta ahora

lo hace sólo Telefónica.

A este respecto, el directivo

ha recordado que el coste del servicio universal no depende del

organismo que preside y que sus recomendaciones a veces no son

consideradas, al tiempo que ha indicado que la fórmula de la

financiación mixta (pública y privada), tiene algún sentido.

Por otra parte, la CMT se encuentra actualmente en la fase de identificación

de los mercados de referencia establecidos por la nueva legislación de

telecomunicaciones, otorgando prioridad a aquellos que necesitan un

cambio regulatorio.

Una vez que localice la existencia o no de

operadores con poder significativo en el mercado decidirá qué

obligaciones hay que mantener, introducir o suprimir en caso de que se

den las condiciones de competencia efectiva.

Según el presidente

de la CMT, en muchas áreas de algunos mercados ya existe competencia

efectiva en servicios y precios, aunque no ha precisado cuáles.

En cualquier caso, en estas áreas ya no es necesario un marco regulatorio tan

rígido y predeterminado como hasta ahora.

Asimismo,

Bustelo ha expresado la necesidad de realizar un análisis más profundo

del acceso al bucle de abonado. En este sentido, señala que si se

quiere fomentar la innovación y la inversión no puede seguir la obsesión

de bajar los precios de acceso al bucle de abonado.

Bustelo

también ha recordado que para hacer frente a las novedades impuestas por

el nuevo marco regulatorio la CMT se ha reorganizado y ha adoptado una

estructura casi empresarial, con la creación de direcciones

corporativas y operativas que permiten una mayor agilidad en la

tramitación de expedientes. Además, la reciente reorganización del

organismo regulador supone la creación de una nueva dirección de

estudios, responsable del análisis de los mercados de referencia.