La compra por Microsoft y Time Warner de ContentGuard, a examen
La Comisión Europea sostiene que esta transacción podría fortalecer la posición dominante de Microsoft en el mercado DRM.
La Comisión Europea ha anunciado la apertura de una investigación exhaustiva sobre la compra por parte de Microsoft y Time Warner de la empresa ContentGuard Holdings, especializada en el desarrollo de tecnologías de gestión de derechos digitales (DRM, por sus siglas en inglés), que concluirá como muy tarde el 6 de enero del próximo año.
La operación investigada se remonta al pasado mes de abril, cuando el principal fabricante de software del mundo y el grupo mediático tomaron sendas participaciones mayoritarias en ContentGuard, mientras que el anterior propietario, Xerox, mantuvo una pequeña parte del capital.
Para el Ejecutivo comunitario, esta transacción podría “crear o fortalecer una posición dominante de Microsoft en el mercado de las aplicaciones de gestión de derechos digitales”. Asimismo, la Comisión investigará la integración vertical de la compañía fundada por Bill Gates en otros mercados.
Fuentes próximas al caso señalan que Bruselas ha puesto en marcha esta indagación como consecuencia de la complejidad de la industria de DRM, que se encuentra todavía en las primeras fases de desarrollo y tiene el potencial para convertirse en un negocio bastante lucrativo.
En este sentido, la portavoz del comisario de Competencia de la UE, Amelia Torres, afirma que el gigante de Redmond es ya el líder mundial en aplicaciones de esta tecnología de protección de archivos digitales frente a copias y usos no autorizados, algo que reclama con insistencia la industria del ocio y el entretenimiento.
La compra fue notificada a la Comisión el pasado 12 de julio y se abrió entonces una investigación de rutina de un mes de plazo. Para solucionar los problemas de competencias encontradas durante la misma, ambas compañías realizaron una oferta, pero Torres destacó que no solventaban las preocupaciones del Ejecutivo comunitario.
En concreto, Bruselas considera que la adquisición podría permitir a ContentGuard dominar tanto los beneficios como la capacidad de utilizar sus productos de derechos de propiedad intelectual para poner a la competencia de Microsoft en el mercado de soluciones DRM en desventaja.