La SVP Alliance gana adeptos

Empresas

AMD, Amstrad, Philips Electronics, Cablevision, Pace Micro Technology, Sky Italia, Texas Instruments y Yes ya se encargan de la protección de contenidos digitales.

La SVP Alliance, grupo especializado en la protección de contenidos, anuncia la incorporación de ocho nuevas empresas, AMD, Amstrad, Philips Electronics, Cablevision, Pace Micro Technology, Sky Italia, Texas Instruments y Yes, para lograr un cómputo total de 22 compañías. La iniciativa de la SVP tiene una importancia especial para el sector especializado en las transmisiones por cable, ya que pretende abrir una vía que permita la más amplia distribución de contenidos de pago a través de redes domésticas.

“Es importante que conozcamos los estándares de protección de contenidos necesarios para la distribución de programación a través de redes domésticas,” ha afirmado Wilt Hildenbrand, vicepresidente ejecutivo de la división de tecnología e ingeniería de Cablevision. “Creemos que el nivel de protección que proporciona la SVP nos permitirá ofrecer contenidos premium a nuestros abonados, para que puedan acceder a ellos de forma segura, cuando lo deseen”.

De modo paralelo, Lucas Covers, vicepresidente senior de la división de descodificadores de Philips, explica que “Philips se compromete a ofrecer soporte a las iniciativas para la protección del contenido y las soluciones para gestión de derechos digitales (DRM) basadas en estándares abiertos, especialmente las creadas por la OMA. El sistema SVP tiene como objetivo la protección de contenidos en aplicaciones para la transmisión de programación. Si el mercado logra despegar, la tecnología SVP se convertirá en una solución para la distribución de contenidos de pago desde nuestros descodificadores a una amplia gama de productos de consumo”.

De acuerdo con esto, las operadoras de red que utilicen dispositivos compatibles con la tecnología SVP van a poder utilizar las prestaciones que ofrece esta solución para recibir, almacenar y visualizar con seguridad el contenido en redes domésticas y dispositivos de consumo como, por ejemplo, televisores digitales, descodificadores, grabadores de vídeo con disco duro y dispositivos móviles.