Las operadoras europeas sellan una alianza

Movilidad

La macroalianza, a la que puede sumarse Orange, prevé acciones conjuntas en el lanzamiento de nuevos productos y servicios, así como colaboraciones en la creación de plataformas y desarrollos tecnológicos.

La española Telefónica Móviles, la alemana T-Mobile, filial de telefonía del grupo Deutsche Telekom, y la italiana Telecom Italia Mobile proyectan una alianza para cooperar internacionalmente en telefonía móvil.

Así, el semanario germano WirtschaftsWoche asegura en su edición de esta semana que las tres firmas buscan un acuerdo semejante al que une a las compañías aéreas, que permita mejorar el servicio a sus clientes en otros países y aumentar la cobertura de sus redes. Además, la alianza permitiría a estas firmas competir con el gigante británico de las telecomunicaciones Vodafone, presente en prácticamente todos los países europeos.

De este modo, la macroalianza comercial, a la que puede incorporarse Orange en los próximos días, la operadora celular de France Telecom en Francia y Reino Unido, prevé acciones conjuntas en el lanzamiento de nuevos productos y servicios, y colaboraciones en la creación de plataformas y desarrollos tecnológicos. Sin embargo, fuentes de Telefónica han rechazado comentar el acuerdo.

Las cuatro operadoras, líderes en sus respectivos mercados, buscan ahora unir fuerzas ante el reto de la telefonía móvil multimedia, a la que las compañías confían su crecimiento en los próximos años, a la vez que tratan de compensar el fiasco de la tecnología UMTS, en la que las empresas han enterrado más de 100.000 millones de euros, según informan fuentes próximas a las entidades.

Vodafone destinó más de 18.000 millones, frente a los 15.000 millones de Deutsche Telekom, mientras Telefónica Móviles destinó más de 5.000 millones de euros. Junto a esto, hay que destacar que las empresas quieren hacer frente a Vodafone, la mayor operadora de móviles del mundo, con 130 millones de clientes en 30 países.

Por otra parte, y de materializarse el acuerdo, Telefónica Móviles reduciría fuertemente todas sus inversiones en el extranjero y ofrecería sinergias en costes operativos con la consiguiente mejora en márgenes. Además, la operadora española conseguiría tener una presencia relevante en Europa sin que le suponga un fuerte desembolso financiero.