El futuro de Nintendo, amenazado por las apps [Veredicto: Angry Bros.]

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Si a los directivos de Nintendo hace unos años, con la Wii comiéndose el mercado de entretenimiento doméstico y con las portátiles DS gozando de gran popularidad, les hubieran dicho que su reinado podría verse en peligro debido a los móviles probablemente habrían sonreído. Hoy es posible que la risa no esté dibujada en sus rostros y sí un grave semblante de preocupación.

Móviles con pantallas cada vez más grandes, tablets cada vez más potentes, y casi todos ellos con posibilidad de conectarse al televisor e incluso usar mandos inalámbricos, cuando no la propia superficie táctil de la pantalla, para manejar el videojuego. Pero por encima de todo dos cualidades: precio y portabilidad.

Puedes comenzar la partida en el autobús de camino al trabajo, continuar en la pausa para el almuerzo, y terminar de regreso a casa conectando el dispositivo móvil al televisor. Pero además el videojuego (ahora llamado aplicación o app) en muchos casos es gratuito o tiene precios irrisorios entre 1 y 3 euros.

Una invasión en toda regla del terreno de juego en el que Nintendo lleva los últimos años moviéndose y que podría producir un vuelco en la tendencia de los consumidores que supondría un serio revés para la compañía. ¿Por qué gastar dinero en una consola portátil si ya tengo móvil, porqué gastar dinero en una consola doméstica si me basta un cable para conectar el móvil a la tele? O ni eso, con la conectividad inalámbrica por no hablar de la nueva generación de televisores inteligentes con SO Android integrado… a falta de que Apple algún día se decida a dar el salto con una hipotética iTV.

Algunos analistas incluso se atreven a vaticinar que Wii U podría ser la última consola de Nintendo tal y como las entendemos hasta ahora, y serán determinantes las cifras de ventas en esta campaña navideña que en USA comienza extraoficialmente con el Black Friday de la semana pasada.

Por el momento la cadena Game Stop, que abrió más de 3.000 establecimientos el pasado viernes para aprovechar el tirón de estas fechas, vendió todas las unidades de Wii U que tenía en stock. En beneficio de esta consola podemos decir que al tratar de convertirse en híbrido de consola y tablet trata de adelantarse a esta tendencia que podría resultar perjudicial para Nintendo, aunque quedaría una importante batalla: la de los precios.

Por otro lado una idea que algunos ejecutivos de la empresa valoran es la de licenciar sus personajes (exclusivos para las consolas de la casa) de forma que puedan aparecer en otros dispositivos. ¿Imaginas poder jugar a Mario Bros. con tu iPhone? Pues de momento parece que va a ser que no, pero no hay que olvidar que en los últimos años Nintendo está afrontando serias pérdidas, 530 millones de dólares en el pasado año fiscal. Mal momento para convencer a alguien de que se gaste 300 dólares en una consola y 50 en el videojuego cuando las operadoras venden móviles por la mitad de precio de la consola y los juegos son gratis o cuestan un par de euros.

Una de las estrategias que desde Nintendo plantean va en ese sentido, ofrecer juegos más sencillos (y económicos, incluso gratuitos) para la consola portátil y otros más completos y complejos para la versión doméstica. ─[The New York Times / Imagen: Campeche]