3 de cada 4 consumidores españoles confían en el contenido que crea la IA generativa
Dos tercios de los consumidores estarían dispuestos a pedirle consejo sobre sus relaciones personales o sus planes vitales y profesionales, según un informe de Capgemini.
Más de la mitad de los consumidores (51%) asegura conocer las últimas tendencias en la IA generativa y ha explorado las herramientas, utilizándolas con fines creativos como la generación de contenidos (52%) y brainstorming (28%).
Así se desprende del último informe del Instituto de Investigación Capgemini, Por qué los consumidores aman la IA generativa, que analiza cómo los consumidores de todo el mundo utilizan aplicaciones de esta tecnología y cómo podría ser la clave para acelerar el futuro digital de la sociedad.
Para la realización de este informe, el Instituto de Investigación Capgemini ha realizado una encuesta cuantitativa a 10.000 consumidores mayores de 18 años en 13 países: EE.UU., Europa y Asia-Pacífico: Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Países Bajos, Noruega, Singapur, España y Suecia.
El estudio también pone de manifiesto que estas innovaciones ya están siendo integradas por usuarios de distintas generaciones. Su adopción se muestra notablemente homogénea en todos los grupos de edad y zonas geográficas: más de la mitad de todas las generaciones, incluidos los baby boomers, han utilizado esta tecnología.
Los usuarios que utilizan la IA generativa a menudo están más satisfechos con los chatbots, juegos y casos de uso en sus búsquedas; sin embargo, las plataformas de la IA generativa también se utilizan para actividades personales cotidianas.
Más de la mitad de los encuestados (53%) confía en la IA generativa para que les ayude con la planificación financiera. A nivel mundial, el 67% de los consumidores indicó que podría beneficiarse de recibir diagnósticos y consejos médicos de la IA generativa, y el 63% señaló que le entusiasma la perspectiva de que ayude a descubrir fármacos más precisos y eficientes.
Además, dos tercios (66%) de los consumidores estarían dispuestos a pedir consejo a la IA generativa para sus relaciones personales o sus planes vitales y profesionales, siendo los Baby Boomers el grupo de edad más propenso (70%) a utilizarla con este fin.
La ética está en un segundo plano
A pesar del potencial de los ciberataques y los deepfakes, los consumidores son poco conscientes de los riesgos. Como resultado, casi la mitad (49%) de los consumidores sigue sin inquietarse por la posibilidad de que se utilice la IA generativa para crear noticias falsas, y solo el 34% de los encuestados está preocupado por los ataques de phishing.
La concienciación de los consumidores en torno a las cuestiones éticas de la IA generativa también es baja, ya que sólo al 33% le perturban los problemas de derechos de autor y aún menos (27%) el uso de algoritmos de la IA generativa para copiar diseños o fórmulas de productos de la competencia.
Por otro lado, casi la mitad de los consumidores (43%) están interesados en que las organizaciones implementen la IA generativa en todas las interacciones con los clientes, y la mitad de los consumidores están entusiasmados con las extraordinarias experiencias inmersivas e interactivas que esta tecnología puede permitir.
Es una buena oportunidad para las empresas, ya que las herramientas de la IA generativa ya son utilizadas por el 70% de los usuarios que busca recomendaciones de nuevos productos y servicios, y la mayoría (64%) de los consumidores está dispuesta a realizar compras basándose en estas recomendaciones. No hay una variación significativa entre grupos de edad y el 67% de los consumidores anticipa positivamente la capacidad de la IA generativa para ofrecer recomendaciones personalizadas sobre moda y decoración del hogar.
“La toma de conciencia de la IA generativa entre los consumidores de todo el mundo es notable, y la tasa de adopción ha sido masiva, sin embargo, la comprensión de cómo funciona esta tecnología y los riesgos asociados es todavía muy baja”, comenta Niraj Parihar, CEO de la línea de negocio global Insights & Data y miembro del Comité Ejecutivo del Grupo Capgemini.
“Si bien la regulación es fundamental, las empresas y los socios tecnológicos también tienen un papel importante que desempeñar en la educación y la aplicación de las garantías que abordan las preocupaciones sobre la ética y el mal uso de la IA generativa”, apostilla.