¿Para qué demonios queremos un escáner de tarjetas de visita?
En sí, Simply Scan no es más que una cámara pequeña de baja resolución colocada de tal manera que al colocar las tarjetas dentro del escáner saca una foto precisa de las mismas.
Luego al volcar las fotos, con un software incluido con el escáner (menos mal) saca la información relevante de las mismas y la incluye en tu agenda de contactos.
Visto así no parece tan mala idea, pero pensando que hoy en día las tarjetas son de formatos de todo tipo, que el aparatito en cuestión cuesta casi 100 euros y que te obliga a llevar un cachivache más cuando un móvil puede hacerlo incluso mejor, al final te quedas con el culo torcido.
Yo al menos en mi mente no hago más que ver al CEO de la empresa arruinado gritando al cielo ¿POR QUÉ? como si de McBain acordándose de Mendoza se tratara.— Dani Burón [Novac]