Las bolas metálicas se pueden partir, hasta tienen su uso
No, no es Pac-man antes de que lo pintaran de amarillo. Tampoco es ninguna parte del cuerpo de Iron-man, partida en dos por algún poderoso (y malvado) karateka. Qué cachivache más misterioso. ¿Será USB? ¿Se podrá acceder a Internet con él? La respuesta tras el también misterioso salto.
Se trata de un maravilloso abrebotellas de vino, por gentileza de OXO. Pero no se encarga de quitarles el corcho, si no la lámina de papel de aluminio que lo recubre. Sólo tienes que cerrar su boca sobre el extremo de la botella, apretar, girar y listo.
¿Impresionado? Quizá no es algo tan tecnológico como habías pensado, pero a los aficionados al vino les vendrá de perlas. Sobre todo a aquellos que riegan sus paladares y quieran ver reflejada en su bruñido abridor toda su aristocracia. O simplemente para tener una excusa y abrir otra botella. —Javier G. Pereda [OXO]