Barcelona, ¿el próximo Silicon Valley de los juegos en Europa?
La Asociación de desarrolladores y editores de videojuegos de Cataluña afirma durante el Gamelab que la Ciudad Condal puede “contar con cincuenta Angry Birds” y crear una industria fuerte.
Desde el jueves se celebra en Barcelona la VII edición del Gamelab, una feria de juegos que en esta ocasión centra gran parte de su programa en los títulos sociales y para dispositivos móviles. Que el encuentro se emplace en la Ciudad Condal no es algo casual. Además de ser la sede del Mobile World Congress de Barcelona y capital mundial del móvil, la urbe concentra gran parte de las empresas catalanas dedicadas a la creación de juegos.
Cataluña supondría el 40% de la producción de videojuegos que se hacen en España, con un tejido empresarial de 70 compañías y una media de cinco años de antigüedad. Este grupo de empresas emplean a entre 500 y 600 personas y son capaces de producir 130 títulos de videojuegos, facturando 50 millones de euros anuales. Son datos proporcionados por la nueva Asociación de desarrolladores y editores de videojuegos de Cataluña (DEVICAT), que ha sido presentada estos días en la feria, según informa Efe.
La intención de DEVICAT es convertir a Barcelona en un Silicon Valley europeo para los juegos. Según el presidente de la asociación, Gerard Fernández, tienen capacidad suficiente “para crear cincuenta Angry Birds y una industria fuerte”.
El objetivo no es fácil, puesto que la ciudad catalana deberá competir con Berlín y Helsiinki y todo su ecosistema de start-ups. No obstante, desde DEVICAT confían que la calidad de vida propia de Barcelona, el ambiente mediterráneo y el contenido cultural de la ciudad le den bastantes puntos.
“Esperamos crear un referente, atraer capital, talento y que nuestra IP pueda ser visible en todo el mundo”, comentaba Fernández.
Muchas empresas tecnológicas españolas han sabido ver el atractivo de Barcelona como puerta de Europa y ciudad que atrae a los jóvenes talentos extranjeros. Es el caso de Tuenti, quien decidió abrir una nueva oficina en la Ciudad Condal (centrada sobre todo en el desarrollo) precisamente con esta finalidad.