No se trata de ningún accidente, fallo o situación delicada. Esta vez las dos sondas que se estrellarán contra la superficie de la Luna esta noche obedecen a una misión que pretende obtener datos sobre la naturaleza y composición de una montaña cercana al polo norte de nuestro satélite. A las 23:38 hora española no hace falta que te dejes los ojos mirando a la Luna para ver si se produce una nube de polvo porque el impacto se producirá en una zona que en ese momento permanece en sombra.
